martes, 10 de febrero de 2015

Iba caminando por la calle y alguien gritó: -Comprate una cabeza-

Orinaros espontáneos
en playas de turistas.
Cien alcoholes por segundo
antes de las nueve.
Changos de supermercados
repletos de botellas:
-un vodka
-dos naranjas
-un fernet
-dos cocas
-cuatro litros de cerveza
-tres paquetes de salchichas
-pan
-mostaza

(Rolas de postre)
(Salir a patear)

Aprovechar o asesinar
las posibilidades que el universo  nos ofrece.
Experimentar ser parte de este mundo,
intentar integrarse,
establecer un diálogo intimo
en la megalópolis tecnocrática:
-Whats up
-Gmail
-Facebook en tu celu
-paladines del GPS,
-donde y con quien estuviste
-y quienes fueron
-y quienes no
-y los indecisos de siempre que tal vez, asistan.

(No se ha podido establecer conexión a internet)
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Y reggae en la playa
y huellas en la arena.
Noche de luces descendiendo
en la opacidad del cielo.

Wi fi de porro;
sal de la escencia;
teatro sin texto;
de pepa:
alquilo colores
 y me regalan sonidos.

Una promo pornográfica
que me vende una compu del plan igualdad
tuneada.

Gorilas en zungas de leopardo

Jóvenes nestornautas kafkianos

Restos de pólvora
en las manos del poder
que hoy,
más que nunca,
activa
recitales gratuitos
en la playa
mientras anuncia suicidios mediáticos
porque el futuro ya llegó
y me parece,
amigos, 
que está bastante fulero...

(Enero 2015) (Argentina) 

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